En un esfuerzo por mitigar los riesgos de incendios forestales, se ha puesto en marcha una ambiciosa iniciativa de pastoreo preventivo que abarcará un total de 4.140 hectáreas. Este martes, el consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, supervisó las labores en la urbanización La Berzosa, en Hoyo de Manzanares, un área que requiere medidas de autoprotección según el Plan de Protección Civil contra Incendios Forestales de la Comunidad de Madrid (INFOMA). El objetivo es garantizar la seguridad mediante el desbroce de la vegetación seca y el aclarado de la masa arbórea, asegurando un respaldo con fajas perimetrales de 30 metros de ancho.
Planificación y prevención
En paralelo al pastoreo, se intervendrá en otras 1.700 hectáreas mediante la creación de fajas, 396 hectáreas de repaso de cortafuegos utilizando maquinaria pesada como bulldozers y motoniveladoras, y 218 hectáreas de siega de pasto. Para llevar a cabo estas tareas, se han desplegado 304 efectivos distribuidos en 25 retenes forestales que operarán en 58 municipios durante los meses de octubre a mayo, considerados de riesgo bajo y medio para incendios. Los ayuntamientos de zonas de alto riesgo, como Hoyo de Manzanares, deben desarrollar sus propios planes de actuación municipal contra incendios forestales. El Cuerpo de Bomberos autonómico es el encargado de definir las áreas de actuación y coordinar los equipos de trabajo.
Se han programado 130 intervenciones que incluyen desbroce, podas, apeos, corte de ramas y eliminación de restos vegetales. Estos profesionales están equipados con vehículos que permiten realizar un primer ataque en caso de conato de incendio, apagándolo o impidiendo su avance. Este enfoque proactivo es crucial para mantener la seguridad en áreas con vegetación densa. El mantenimiento de cortafuegos y caminos es fundamental para la accesibilidad a los montes.
En este sentido, se trabajará en el mantenimiento y repaso de 380 hectáreas de cortafuegos y 61,55 kilómetros de caminos y pistas forestales. Para ello, se utilizarán equipos de maquinaria pesada, incluidos tractores de cadenas o de ruedas, motoniveladoras y rodillos. Estas acciones se desarrollan en seis áreas clave: Lozoya-Somosierra, Parque Nacional Sierra de Guadarrama, Zona Centro, Sur-Occidental, Campiña del Este y Comarca de Las Vegas.
Brigadas en acción
Con el inicio de la temporada alta de incendios forestales, que abarca de junio a septiembre, las brigadas que han estado trabajando durante el resto del año se integrarán al Plan INFOMA. Este plan contó el pasado verano con la participación de 5.924 profesionales y voluntarios, incluyendo bomberos, agentes forestales, trabajadores del centro de emergencias Madrid 112 y voluntarios de Protección Civil y el Equipo de Respuesta Logística Inmediata (ERIVE). La colaboración entre estos equipos es esencial para afrontar los desafíos que presenta la temporada alta de incendios. En 2024, las estadísticas reflejan que la mayoría de los incendios, un 75%, se quedaron en conatos, sin superar una hectárea quemada.
Durante este periodo, se registraron 239 incendios, una cifra inferior a la media de la última década, que es de 280. Estos siniestros afectaron a un total de 1.667 hectáreas, de las cuales 1.208 eran pasto y 449 matorral. La rápida regeneración de la vegetación quemada es un aspecto positivo que facilita la recuperación del entorno natural. El enfoque preventivo y la coordinación entre las diferentes entidades implicadas son claves para reducir el impacto de los incendios forestales. Las acciones llevadas a cabo no solo buscan proteger el medio ambiente, sino también garantizar la seguridad de las comunidades cercanas a las áreas forestales. A medida que se acerca la temporada alta, el compromiso y la preparación de los equipos serán fundamentales para enfrentar cualquier eventualidad con eficacia.