Cañonazo en Londres. El Paris Saint-Germain dio este martes el primer gran paso hacia la final de la Champions League al vencer (0-1) al Arsenal de Mikel Arteta en el Emirates Stadium, en el partido correspondiente a la ida de las semifinales. Un gol tempranero de Ousmane Dembélé, que apenas necesitó tres minutos para aparecer como protagonista estelar, bastó a los de Luis Enrique para llevarse la victoria ante un rival que no supo reaccionar, versión contradictoria a la ofrecida en Madrid.
En su sexto enfrentamiento en competición europea, el PSG por fin logró imponerse al Arsenal y lo hizo en un escenario hostil que soñaba con otra noche mágica como la vivida ante el club blanco en cuartos. Pero esta vez, la efervescencia de la grada no bastó. El equipo parisino salió a tumba abierta, sin complejos y encontró premio rápido: Kvaratskhelia desbordó por la izquierda y asistió a Dembélé, que conectó un zurdazo cruzado tras un leve toque en el palo para silenciar el estadio (4').
Ousmane Dembelé (10) acerca al PSG a la final de la Champions League 2025 | EFE
Fue un inicio demoledor del PSG, que además dominó durante buena parte del primer tiempo. Marquinhos de cabeza y Doué con un disparo seco obligaron a intervenir a un seguro David Raya, mientras el tridente ofensivo parisino -liderado por un brillante Fabián Ruiz moviendo la sala de máquinas- se imponía a una defensa 'gunner' superada en intensidad y precisión. Algo muy poco común esta temporada.
Al Arsenal le costó entrar en el partido. Su primer aviso serio no llegó hasta el minuto 24 con un cabezazo inocente de Kiwior y no fue hasta el tramo final de la primera parte cuando Bukayo Saka y Martinelli despertaron tímidamente al Emirates. Este último dispuso de la mejor ocasión para los locales antes del descanso, en un mano a mano que Donnarumma resolvió con autoridad. El italiano recupera estatus.
El Parque de los Príncipes dictará sentencia
La segunda parte arrancó con susto para los visitantes. Una falta lateral ejecutada por Declan Rice -poco más hace falta añadir para meter miedo- terminó con un gran cabezazo de Mikel Merino que batió a Donnarumma, pero el VAR detectó fuera de juego y anuló el tanto. El gol fantasma revitalizó al Arsenal, que se volcó en ataque con más corazón que ideas. Pero fue de nuevo el conjunto parisino quien dispuso de las mejores oportunidades, no librándose no obstante de otra alerta.
Jurrien Timber (12) derriba a Khvicha Kvaratskhelia (7) en el Emirates | EFE
Ya sin Dembélé -retirado lesionado en el minuto 70-, el PSG perdonó el 0-2 hasta en dos ocasiones claras. Barcola, su sustituto, erró un disparo franco tras una buena combinación con Gonçalo Ramos, quien también estrelló un remate en el larguero en los compases finales. Aun así, el equipo francés mostró una madurez competitiva inusual, sabiendo sufrir en defensa y gestionando los nervios en el tramo final.
El Emirates terminó frustrado, con la sensación de haber dejado escapar una oportunidad de oro. El PSG, en cambio, lo hizo reforzado y con medio billete para la final de Múnich en el bolsillo. La vuelta se jugará el próximo miércoles (7 de mayo) en el Parque de los Príncipes, donde los de Luis Enrique esperan rematar el duelo.
"No estábamos hundidos cuando perdimos 0-1 en casa y fuimos a Anfield a ganar el partido, ahora no está ganado el partido ni la eliminatoria. Tenemos que ganar el partido de casa porque es posible que el Arsenal pueda hacer gol. No tienen ya nada que perder y están por detrás en la eliminatoria. Va a ser una vuelta apasionante para los aficionados al fútbol y un poco más sufrida para los entrenadores", auguró al respecto el técnico gijonés tras el encuentro disputado este martes en Londres.
