Imprescindibles en cualquier dieta saludable, las frutas y verduras aportan gran parte de los nutrientes que el organismo necesita para su correcto funcionamiento. Así lo aseguran desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) que recomiendan comer al menos 400 g de estos alimentos al día para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles y garantizar la ingesta suficiente de fibra dietética. Frutas como el kiwi o la granada, que ayudan a combatir conocidas dolencias; o verduras como los espárragos, un versátil y nutritivo alimento que, como el calabacín, no puede faltar en la dieta.
El origen del calabacín es incierto y los historiadores creen que podría situarse en la India o en América del Sur, un alimento que cuenta con unas excelentes propiedades nutricionales gracias a las que, según los expertos, ofrece numerosos beneficios para la salud.
El calabacín cuenta con unas excelentes propiedades nutricionales. Foto: Freepik
Las enfermedades que el calabacín ayuda a combatir
Tal y como señala la Fundación Española de la Nutrición (FEN), el calabacín se cultiva tradicionalmente en los huertos de la zona mediterránea y su mejor época de consumo y recolección es de noviembre a agosto, aunque podemos disfrutar de los beneficios de esta hortaliza durante todo el año.
Con un gran contenido en agua, el calabacín es una de las hortalizas con menos contenido calórico y, según la FEN, destaca por su aporte de vitamina C- “un calabacín de tamaño medio aporta el 26% de las ingestas recomendadas al día para esta vitamina en hombres y mujeres de 20 a 39 años”- y potasio.
Pero además, este alimento cuenta con vitaminas del grupo B, esenciales para obtención de energía, calcio, fósforo, hierro y magnesio. Unas propiedades nutricionales que hacen que el calabacín ayuda a combatir algunas conocidas enfermedades:
-Problemas digestivos: gracias a sus propiedades, ayuda a mejorar la digestión y cuida de la mucosa intestinal.
-Estreñimiento: el calabacín es un alimento rico en fibra, principalmente mucílagos, un tipo de fibra soluble que favorece el tránsito intestinal y previene el estreñimiento. Además, su alto contenido en agua ayuda a ablandar las heces y facilitar su evacuación.
Rico en vitaminas y minerales, el calabacín ayuda a combatir algunas enfermedades. Foto: Freepik
-Hipertensión: se trata de un alimento que ayuda a reducir la presión arterial. Esto se debe tanto a su contenido en potasio, que ayuda a eliminar del cuerpo el exceso de sodio, que hace que se retenga líquidos y aumente la presión sobre los vasos sanguíneos; como a su efecto diurético y su contenido en magnesio. Así, según los expertos, se trata de un alimento que ayuda a prevenir la aparición de cardiopatías.
-Obesidad: el calabacín es un alimento que los expertos recomiendan para controlar y reducir el peso. Es bajo en calorías, tan solo 14 por cada 100 gramos; y alto en fibra, que produce sensación de saciedad.
-Anemia: contiene folatos, que ayudan a prevenir la anemia, y además, es rico en vitamina C, por lo que el calabacín ayuda a absorber el hierro de los alimentos.
-Hipercolesterolemia: gracias a su aporte de fibra, vitaminas y antioxidantes, esta irada hortaliza puede ayudar a reducir el colesterol malo (LDL) y aumentar los niveles del colesterol bueno (HDL).
-Asma: el calabacín es rico en vitaminas antioxidantes A y C por lo que puede ayudar en el desarrollo de algunos trastornos inflamatorios como el asma, la osteoartritis y la artritis reumatoide.