Cuatro décadas después, el Tottenham Hotspur volvió a reinar en Europa. En el imponente San Mamés, los Spurs levantaron este miércoles la Europa League 2024/25 tras vencer por 1-0 al Manchester United, en una final inglesa marcada por el nerviosismo y por la urgencia.
El gol decisivo fue obra de Brennan Johnson, quien se convirtió en héroe londinense al anotar justo antes del descanso. Así, el equipo dirigido por Ange Postecoglou cierra su campaña con otra gloria continental, una plaza en la próxima Champions League y el alivio de un título que rompe 17 años de sequía y que permitirá maquillar una temporada irregular, resaltando el 17º puesto -rozando el descenso- cosechado en la Premier League.
La final de la Europa League más 'floja' en mucho tiempo
Con ambiente de gala en las gradas y leyendas como Sir Alex Ferguson o Gareth Bale presentes, el partido arrancó con la previsibilidad de una final entre dos equipos que han decepcionado en liga. Mucha tensión, pocas ideas y un ritmo irregular marcaron el primer acto, en el que el Tottenham logró golpear en su única ocasión clara.
Fue en el minuto 42 cuando Pape Sarr, en una acción de anticipación en el medio, recuperó un balón y envió un centro envenenado que Luke Shaw no logró despejar. El balón cayó a los pies de Brennan Johnson, quien solo tuvo que empujarla para abrir el marcador y sumar su quinto tanto. Un gol con sabor a historia: el primero en una final desde Jonathan Woodgate en 2008.
El británico Brennan Johnson (22) anotó el único tanto de la final de la Europa League | EFE
El tanto desató la euforia en el banquillo de Postecoglou, consciente de que ese gol podía ser suficiente ante un United con más nombres que funcionamiento. El técnico australiano, en su segunda temporada, cumple además así su promesa de devolver títulos a las vitrinas en Londres.
En la segunda parte, el Tottenham apostó por el repliegue, renunciando pronto al balón. Aun así, pudo sentenciar en una contra conducida por Destiny Udogie que el británico Dominic Solanke desperdició. Esa ocasión fallida fue el preludio de un acoso y derribo del Manchester United que, aunque caótico, estuvo cerca del empate en varias ocasiones.
Los de Rúben Amorim, que llegó al banquillo en noviembre para reanimar al equipo, lo intentaron con todo. Bruno Fernandes tuvo un cabezazo que salió rozando el palo y Alejandro Garnacho, al poco de ingresar, generó dos buenas ocasiones. La más clara, sin embargo, llegó en el 67’: un mal despeje de Vicario dejó la portería vacía, pero Van de Ven salvó el empate bajo palos.
Alejandro Garnacho (17) dispara a puerta durante la final ante el Tottenham Spurs | EFE
El United siguió colgando balones hasta el final, empujado más por la inercia y el orgullo que por un plan claro. En el descuento, un cabezazo de Luke Shaw pudo cambiar la historia, pero Vicario se redimió y salvó lo que era un gol cantado.
Más de cuatro décadas esperando otra cima continental
El Tottenham celebró así el cuarto título europeo de su historia (dos Copas de la UEFA, una Recopa y esta Liga Europa), mientras que el United se derrumbaba en otro fracaso más. Sin plaza europea para la próxima temporada -algo que no pasaba desde 2014- y con una plantilla sin rumbo, el gigante de Old Trafford vive su enésima crisis institucional y deportiva.
La imagen de Ferguson en el palco, entre resignado y apesadumbrado, resume la caída de un club que hace no tanto dominaba el continente. Por su parte, el Tottenham escribió una página dorada en Bilbao: primera victoria en Europa desde 1984, clasificación a la próxima edición de la Champions League y el inicio de lo que Postecoglou espera que sea una "nueva era".
Cuando llegamos a finales de enero, al final del mercado de fichajes, tomé la decisión en ese momento de que este era el trofeo al que íbamos a aspirar. Probablemente contradecía lo que otros en ese momento pensaban que debíamos hacer, pero yo creía firmemente que podíamos ganarlo. Desde entonces, cada entrenamiento y decisión, todo lo que hemos hecho en cuanto a partidos, se ha tratado de asegurarnos de que, cuando lleguen estos encuentros, estemos en la mejor posición posible. Eso ha tenido un coste en la liga y tengo que asumir la responsabilidad. Simplemente sentí que el objetivo final, ganar algo, era más importante || Ange Postecoglou
Ni la marcha de Harry Kane, ni la irregularidad en la Premier, ni las lesiones impidieron que los Spurs se coronaran nuevamente en Europa. El parche dorado no será solamente un adorno.