El PSOE se mueve a la desesperada para buscar un acuerdo con Junts que no ponga en riesgo la legislatura. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha ofrecido en última instancia a Carles Puigdemont aceptar la celebración de una cuestión de confianza en la que Sánchez tenga que ver avalada su gestión en el Congreso, pero en paralelo La Moncloa ha inventado una vía alternativa para que, pese a su tramitación, no llegue a celebrarse.
Esa vía pasa porque el Tribunal Constitucional y Europa, a través del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, interpreten nuestra Constitución de modo que la cuestión quede suspendida cautelarmente y pueda impedirse a futuro. De esta forma tanto, Junts como Sánchez ganan tiempo para negociar, sin rechazar este enésimo ultimátum de los separatistas, permitiendo a ambas formaciones avanzar en cuestiones tan sensibles como la delegación de las competencias en materia de inmigración.
Precisamente el movimiento de ficha del Partido Socialista se produce después de que el mediador Francisco Galindo, en un comunicado poco habitual, les reprochase también a los de Sánchez el incumplimiento de algunos acuerdos. El propio Galindo, en su carta firmada en Cartagena de Indias, reconocía que no se han materializado algunas cuestiones para las que existe un acuerdo político. Una de ellas, según ha podido saber este periódico, es la referente al pacto migratorio.
Además de esta oferta respecto a la cuestión de confianza, horas más tarde que Junts recordase que se trata de una condición sine qua non su debate, los socialistas también han ofrecido cerrar un acuerdo inminente sobre el traspaso de competencias de inmigración con una nueva oferta que se aproxime más a las exigencias de los independentistas. Una última propuesta, que estaría lista para firmar, y que incluiría el control de fronteras y la expedición de pasaportes.
Reunión de Junts
El líder del partido convocó a sus colaboradores este lunes para decidir si retiran la proposición no de ley registrada en el Congreso para debatir sobre la conveniencia de que el presidente del Gobierno se someta a una cuestión de confianza. El encuentro presencial -con la excepción de Puigdemont-, ha empezado con cierta puntualidad, con la documentación remitida por Moncloa en las últimas horas sobre la mesa. Como ya es habitual en momentos de grandes decisiones, como el de hoy, los dirigentes de Junts han tenido que dejar su teléfono fuera de la sala para evitar filtraciones.
Cuqui51
24/02/2025 12:29
Gobierno de tramposos inútiles, y no sigo con mas porque son de todo menos buena gente
cnasciturus
24/02/2025 13:06
Desde hace años, cuando veo al guaperas pétreo, y asolo me imagino al escorpión de la fábula, esperando su momento para morder. Ahora ya se puede ir diciendo que la familia aprendió el oficio de jóven. Está en sus naturalezas.