El consumo de café está de lo más extendido en España, y es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo. Para muchos es imposible comenzar el día sin una taza de café, y cada uno tiene sus preferencias y costumbres: solo, con leche, sin azúcar o con hielo. Las posibilidades son incontables, pero lo cierto es que se han de tener varios factores en cuenta al consumirlo.
El café ayuda a estar alerta y disminuye el sueño y la fatiga. Como consecuencia, la cafeína mejora el rendimiento físico y aumenta la capacidad de resistencia, pero no solo eso. Varios estudios afirman que su consumo moderado previene el riesgo de desarrollar patologías como el Alzheimer o el Parkinson. Eso sí, controlar la hora a la que se consume es imprescindible para evitar problemas para conciliar el sueño.
Es peor que tomarse dos cafés
Los profesionales de la salud aconsejan no tomar café al menos seis horas antes de acostarse, debido a que es el tiempo en que la cafeína permanece en el organismo. De igual manera, hay un hábito que ha aumentado considerablemente en los últimos años y que es mucho más nocivo para obtener un buen descanso: el uso del móvil momentos antes de irse a la cama.
Diversos estudios afirman que la exposición a pantallas y a la luz azul que estas emiten suprime la producción de melatonina, la hormona responsable de regular el sueño y el descanso. Así, utilizar el smartphone durante 30 minutos antes de dormir puede provocar dificultad para conciliar el sueño, pero no solo esto. El uso de pantallas puede llevar a sufrir microdespertares y la fragmentación del sueño.
Todo esto no solo conduce al cansancio y fatiga, sino que a la larga puede afectar de manera intensa a la salud mental. Está demostrado que un mal descanso lleva a sufrir estrés y ansiedad, algo que se presenta en distintos síntomas como la sensación de nerviosismo, peligro inminente o el aumento del ritmo cardíaco. Además, destacan otros síntomas:
- Sudoración
- Temblores
- Problemas gastrointestinales
- Dificultad para controlar las preocupaciones
Cómo evitar utilizar el móvil al irse a dormir
Los profesionales aconsejan tomar algunos hábitos para evitar utilizar el smartphone minutos antes de irse a dormir. El primero de ellos es establecer una buena rutina de sueño. Dedicar tiempo a actividades relajantes antes de irse a la cama, como leer o darse un baño caliente son algunas de las opciones. Asimismo, alejar el móvil de la cama -algo que muchos dicen, evita recibir ondas nocivas durante la noche- es otra de las ideas, así como ponerlo en silencio.
Como consejos adicionales destaca evitar utilizar el teléfono como despertador, ya que haciendo esto es más sencillo consultar su pantalla al irse a la cama. Meditar o hacer ejercicios de respiración antes en lugar de utilizar el móvil es otro buen hábito para mejorar el bienestar emocional e incluso reducir el riesgo de padecer cáncer, enfermedad ligada al uso de los móviles, aún sin evidencias científicas concluyentes.
