El Real Decreto 758/2024 desarrolla en 11 páginas las funciones y los objetivos del Consejo de la Productividad de España. Se publicó en el BOE el 31 de julio de 2024. Echaba a andar así un nuevo organismo público, diseñado para afrontar uno de los problemas más enraízados en la economía española: la baja productividad.
Siete meses después, el Consejo avanza sin apenas actividad. Desde su creación sólo se han producido cuatro reuniones. Y no hay aún ni un solo informe publicado. El organismo cuenta con la estructura istrativa correspondiente y con un nutrido plantel de expertos a su servicio. Sin embargo, el vehículo gubernamental circula, por ahora, a una velocidad raquítica.
Esa lentitud chirría a oídos de algunos economistas y organizaciones empresariales, que llevan demasiado tiempo advirtiendo sobre la necesidad de tomar medidas urgentes para propulsar la productividad. Sin ir más lejos, uno de los argumentos que ha usado la CEOE para oponerse a la reducción de la jornada laboral es la brecha con Europa en este aspecto. La patronal que lidera Antonio Garamendi se apresuró a recordar a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, que la productividad por ocupado ha caído con fuerza desde que gobierna la coalición. Y eso que nuestro país ya presentaba unos niveles inferiores en comparación con sus socios europeos.
"Los informes, dictámenes y trabajos del Consejo de la Productividad pondrán a disposición de los poderes públicos un amplio acervo de análisis y medidas encaminadas al fomento de la productividad en España", señala el real decreto que da el pistoletazo de salida al organismo. "Servirán para que los distintos niveles de la istración puedan adoptar políticas que favorezcan la productividad y competitividad, sobre la base de un análisis económico riguroso debidamente fundamentado y de la evidencia empírica disponible", añade.
El Consejo tardó cuatro meses en celebrar la primera reunión, que tuvo lugar en Madrid el 21 de noviembre de 2024. A partir de ahí, según la agenda oficial, se ha convocado un encuentro al mes (19 de diciembre, 16 de enero y 20 de febrero). A cada reunión son citados el presidente, el vicepresidente y los 14 vocales, de manera tanto presencial como telemática.
Expertos reconocidos
El grupo está liderado por Juan Francisco Jimeno, que forma parte de la Dirección General de Economía del Banco de España. Tiene como vicepresidente a Jorge Uxó, doctor en Economía y profesor titular en la Universidad Complutense de Madrid. Entre los vocales hay perfiles de distintos sectores, sobre todo del mundo académico, con experiencia y méritos reconocidos.
En el Consejo comparten mesa economistas como Antón Costa (CES), Enrique Moral (Banco de España), Raymond Torres (Funcas), Eva Senra (Universidad de Alcalá) o Álvaro Escribano (Universidad Carlos III). También hay representantes de los agentes sociales, como Francisco Vidal (Cepyme), Edita Pereira (CEOE) o Natalia Arias (CCOO). Hay otros perfiles más independientes, como el de Nuria Oliver, una de las mayores expertas españolas en Inteligencia Artificial.
Las primeras sesiones se han centrado en definir el concepto de la productividad e identificar cuáles son las principales barreras que impiden a España avanzar con más ímpetu. De momento, se han creado varios grupos de trabajo. "Cada uno de estos grupos se responsabilizará de proporcionar material para un capítulo del Informe Anual de este año", señala Juan Francisco Jimeno en el acta de la reunión del pasado 16 de enero (la última publicada). En ese encuentro se acordó que "este año cada grupo de trabajo defina y proponga el encargo de un estudio específico".
En los debates se está fomentando que los vocales propongan medidas concretas para derribar esas barreras. Ya se han puesto sobre la mesa temas espinosos como la elevada carga regulatoria y las trabas para la inversión empresarial.
Fuentes próximas al Consejo aseguran que aún es pronto para medir la utilidad. El organismo es demasiado 'joven' y los problemas a tratar demasiado 'profundos'. Ambos factores, unidos al diseño del calendario de reuniones (sólo una al mes) pueden explicar que aún no haya ningún informe sobre la mesa. Para este año se espera uno, que debería llegar en la segunda mitad de 2025.
El gran promotor del Consejo de Competitividad fue el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo. Fue él quien lo presentó en La Moncloa tras aprobarlo el Consejo de Ministros. Por eso, está recabando información sobre su funcionamiento. El encargado de transimir los avances es el presidente, Juan Francisco Jimeno. La última vez que le citó el ministro fue el pasado 30 de enero.
Dentro del Consejo se valora favorablemente la posibilidad de discutir abiertamente sobre asuntos espinosos (no hay que olvidar que el organismo depende de Gobierno). Por el contrario, surgen algunas dudas sobre el impacto que los trabajos realizados pueden tener en la economía real. Sobre todo, por los plazos tan amplios con los que se juega. La productividad del futuro se basa, entre otras cosas, en las inversiones que se realicen en el presente. Y esas inversiones, en el caso de las empresas, no atraviesan su mejor momento. Entre otras cosas, por las barreras que el Consejo debe contribuir, cuanto antes, a derribar.
ingmarpepe
01/03/2025 11:29
Pero es que en alguna oposición a funcionario le examinan de productividad? No seamos hipócritas tenemos una de las maquinarias estatales menos productivas del mundo!!! Solo un jemplo. Cuantos siglos hace que se establecieron los procuradores de tribunales ? Unos abogados costosos solo para que recojan los autos del juez y se los transmitan a las partes. Y seguimos hablando de modernizar la justicia. Basta ya de seguir engañando a la gente
jumaca2018
01/03/2025 12:25
¿Será por dinero? Unos cuantos buenos sueldos... y ¡a vivir!