En plena era de la inteligencia artificial, la automatización y el desempleo juvenil, existe una titulación universitaria en España que se erige como una excepción esperanzadora. Según el último informe sobre inserción laboral elaborado por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie), esta carrera alcanza un 100% de afiliación a la Seguridad Social entre sus egresados, con niveles de contratación y adecuación al puesto que rozan la perfección.
El estudio, enmarcado en el proyecto U-Ranking, analiza la evolución de la empleabilidad entre 2013 y 2023 y destaca un dato inquietante: las carreras más rentables en el mercado laboral no siempre son las más populares entre los estudiantes. Y la brecha entre demanda académica y demanda real del mercado sigue creciendo.
La carrera que nadie quiere... pero que asegura el futuro
La carrera con casi un 100% de empleabilidad es Ingeniería de Organización Industrial, según los últimos datos de U-Ranking y el Ministerio de Universidades. A pesar de su rendimiento laboral casi inigualable, y su alta demanda de personal, muy pocos alumnos la eligen cada año en su primera opción de a la universidad.
Esta ingeniería combina gestión empresarial, logística, operaciones y tecnología industrial, convirtiendo a sus egresados en perfiles altamente demandados tanto por el sector privado como por el público. Empresas del sector energético, farmacéutico, de automoción o consultoría técnica pugnan por captar talento con esta formación.
Sueldos altos, estabilidad y crecimiento sostenido
El informe señala que la tasa de adecuación al nivel de estudios es de práctiacemnte el 100%, es decir, que casi todos los egresados trabajan en empleos acordes a su formación. La base media de cotización supera los 36.000 euros anuales, y en puestos senior o con experiencia en multinacionales puede alcanzar los 70.000 euros brutos anuales.
Además, el desempleo entre los titulados en esta carrera es prácticamente nulo. En un país donde, según el INE, la tasa de paro juvenil ronda el 28%, este dato la convierte en una opción estratégica para quienes buscan seguridad, futuro y rentabilidad.
¿Por qué tan poco la eligen?
La paradoja es clara. Mientras que carreras saturadas como Derecho, Psicología o Comunicación siguen acumulando matrículas, la Ingeniería de Organización Industrial sufre de invisibilidad o desinterés. Según expertos del Ivie, esto se debe a:
- Desconocimiento generalizado de su plan de estudios y salidas profesionales.
- La palabra “ingeniería” impone, especialmente entre estudiantes que huyen de las matemáticas o la física.
- Falta de orientación vocacional eficaz en bachillerato.
Los investigadors del Ivie advierten de que el problema no es solo la oferta, sino cómo se comunica y se percibe esa oferta entre los futuros universitarios.
Un futuro por diseñar... y por estudiar
En un mercado laboral cada vez más digitalizado y transversal, perfiles híbridos como los de Ingeniería de Organización Industrial serán aún más necesarios. Su capacidad para entender los procesos técnicos y gestionarlos con eficiencia los convierte en profesionales clave para la industria 4.0 y la transformación digital empresarial.
Elegir bien la carrera universitaria ya no es solo una cuestión de vocación, sino también de estrategia. Y mientras muchos optan por caminos saturados, otros pocos encuentran en esta opción discreta la llave de un futuro laboral blindado.