Persiste el sainete en la facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid. Un centro, el de la UCM, que no consigue salir del eterno bucle de conflictos en el que se ancló desde que el 'caso Begoña Gómez' empezó a ofrecer las primeras derivadas.
De hecho, hace unas semanas, recordarán que contamos la situación entre Ubaldo Cuesta, ex vicerrector de comunicación de la UCM, y Jorge Clemente, decano de la facultad de Ciencias de la Información. Este conflicto de intereses acabó con la dimisión de Cuesta "por motivos familiares" el pasado noviembre.
Pues bien, el mes pasado, en concreto el 18 de diciembre, se celebraron las elecciones para elegir al nuevo decano de Derecho. La terna de candidatos quedó reducida a dos, Manuel Almudí Cid y María Linacero. La victoria fue para Almudí, quien se impuso con visible autoridad a Linacero.
Sin embargo, María Linacero señaló que los comicios deberían ser anulados, ya que, según ella, "no debieron celebrarse por estar viciados de arbitrariedad". La afectada expone que existió un trato de favor previo por parte del Decanato y el Rectorado de la Complutense, dirigido por Joaquín Goyache, hacia Manuel Almudí.
Linacero, que había impugnado las elecciones ante la Junta del Decanato y ante el propio Rectorado, no obtuvo ningún voto. Había cuestionado la legitimidad de Almudí para concurrir a las elecciones, pero en última instancia un juzgado autorizó la celebración de los comicios que dieron ganador a este último.
Ahora, con los resultados oficiales ya consolidados, Linacero anunció a Vozpópuli su decisión de impugnar de nuevo este resultado al considerarse perjudicada por un candidato que, según argumenta Linacero, es externo a la Complutense y que, a su juicio, no reúne los requisitos necesarios para haber concurrido a este proceso electoral.
Tras la negativa de la Complutense, la agraviada ha acudido a la Justicia ordinaria. A través del documento legal al que ha tenido en exclusiva Vozpópuli, Linacero y su letrado solicitan medidas cautelarísimas para frenar el nombramiento de Almudí hasta que se aclare todo el proceso.
Un nuevo y significativo paso en este proceso. La cautelarísima es una figura jurídica que se pide para detener algo hasta que se termine el proceso judicial, porque si no se hace sería irreversible. A expensas de que la Justicia falle en favor o no de Linacero, parece que el asunto está tomando un cariz muy distinto al que quisiera la dirección de la UCM. En los próximos días conoceremos más novedades.
La UCM desestima todos los recursos
Durante el proceso previo a las elecciones, y en las últimas semanas, tanto el rector de la UCM, Joaquín Goyache Goñi, como la Junta Electoral de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense, había decidido desestimar por "falta de legitimación" todos los recursos interpuestos por María Linacero.
De momento, y a la espera de la proclamación oficial de Almudí, Linacero, una experimentada catedrática de Derecho Civil, y su abogado, van a tratar de mantener abierto el caso hasta que se resuelvan, definitivamente, todos los recursos a que tienen derecho.
Los esfuerzos tanto de la candidata a Decano, que no obtuvo ningún voto, como de su abogado, para paralizar el recuento de votos ayer mismo por la tarde, fueron infructuosos. Ese recuento se llevó a cabo en presencia de agentes de la Policía Nacional. A juicio de Linacero, el recuento debió haberse interrumpido, pero la presidencia de la Mesa electoral lo descartó.
