Collboni, tras los pasos de Illa. Después de que el Ejecutivo de Illa firmase ayer el controvertido Pacto Nacional por La Lengua —un acuerdo con ERC y los comunes que persigue imponer el catalán en todos los ámbitos de la sociedad, incluyendo la empresa privada y la istración de carácter estatal—, el alcalde de Barcelona afronta la segunda mitad de su mandato con una remodelación de su gabinete que incluye la creación de un comisionado de Política Lingüística. Se trata de una figura que dependerá de manera directa de Alcaldía y que es fruto de los pactos con Esquerra Republicana, que no se incorporará finalmente al gobierno pero ejercerá como "socio preferente" del Ejecutivo en la Lengua, Turismo Transformación Urbana. Cabe recordar que el gobierno de Collboni cuenta con solo 10 escaños, lo que reduce notablemente su margen de maniobra.
En cualquier caso, se encuentre pendiente la designación de la persona que ocupará dicho cargo. Y aunque no se han concretado las acciones que llevará a cabo este comisionado, Collboni adelantó el pasado octubre que la Ciudad Condal tenía previsto promover una nutrida batería de medidas en favor del monolingüismo en catalán —de las que, presumiblemente, se ocupará el nuevo comisario—. Entre ellas, instaurar un Día de la Lengua, campañas en el metro y comercios, exigir a monitores y entrenadores deportivos que se expresen en catalán y asegurarse de que los estudiantes universitarios y médicos procedentes del extranjero también lo adopten.
La remodelación, por lo demás, también ha sumado una quinta tenencia de alcaldía, que ocupará Raquel Gil y que se encargará de las áreas de servicios sociales y promoción económica, además de las de trabajo, feminismos y memoria democrática. El objetivo de la nueva tenencia es otorgar un "enfoque más transversal a las políticas de reducción de desigualdades y creación de prosperidad". Otro de las novedades relevantes es el traslado de las competencias en vivienda, que ya no gestionará la tenencia de Alcaldía de Laia Bonet (Urbanismo y Movilidad) sino la de Jordi Valls, actual responsable de Economía, Hacienda y Turismo. Finalmente, aparte del comisionado lingüístico, se crean dos más: el de Promoción Económica, que ocupará Nadia Quevedo; y otro de Rehabilitación, dependiente de la cuarta tenencia de alcaldía y aún por designar.
jberanobarre
14/05/2025 17:52
Si no fuera patético daría para unas risas. Jueves pasado, cuatro de la tarde, Plaza de la Bonanova en Barcelona, cogollo de la burguesía clásica catalana. Terraza de 8 ó 9 mesas , ocupadas la mayoría por jóvenes 16-18 años, unos 4-6 por mesa. Por la pinta niños de casa bien, de los que estudian en los colegios de la zona, La Salle, Jesús María, etc. Por supuesto en inmersión lingüística, como. o podía ser de otra manera. Pues ni una sola mesa utilizaba el catalán como lengua vehicular , de uso social, por supuesto de vez en cuando alguien decía algo en catalán para pasarse inmediatamente al castellano. Tenían plena libertad para utilizar la lengua que quisieran, dominan las dos, y se comunicaban en la de Cervantes. Eso es lo les duele a los indepes, que creían que cuando todos supiesen catalán, lo utilizarían en su vida personal, y se han equivocado. Y si eso es ahí, imagínense en los barrios de Lamine Yamal, en las ciudades del cinturón industrial. Por cierto, si van por ahí y ven gente de más de 50 años en las mesas, la mayoría hablará en catalán, con naturalidad, con la misma con la que sus hijos no lo hablan. Compadezco a los indepes, salvo a los que viven del chiringuito. Han perdido su guerra, la del catalán, en Barcelona y cinturón industrial. De aquí a 50 años, ya pueden meter millones y millones, que sus nietos no lo usarán.