El estrés es uno de los principales problemas de salud de la vida moderna, y una de las principales causa de consulta médica. Una reacción fisiológica del organismo que se defiende ante lo que considera una amenaza que afecta tanto a la mente como al cuerpo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el estrés como “un estado de preocupación o tensión mental generado por una situación difícil”, y señala que todas las personas tenemos un cierto grado de estrés, sin embargo, “es la forma en que reaccionamos al estrés lo que marca el modo en que afecta a nuestro bienestar”.
Ante situaciones de estrés, el cuerpo responde mediante señales nerviosas y hormonales e incita a las glándulas suprarrenales, que se encuentran encima de los riñones, a liberar hormonas como la adrenalina y el cortisol.
Conocida como la ‘hormona del estrés’, el cortisol desempeña un papel vital en la salud y en las funciones del organismo. Sin embargo, cuando sus niveles se mantienen altos durante mucho tiempo, como cuando se sufre estrés crónico, puede tienes consecuencias negativas para la salud.
Tener el cortisol alto de manera prolongada puede provocarnos problemas como fatiga constante, aumento de peso, dolor de cabeza, problemas de concentración, irritabilidad, tensión arterial alta, y niveles altos de azúcar, entre otros.
El cortisol alto puede provocar problemas de salud como dolor de cabeza, irritabilidad o fatiga. Foto: Yanalya en Freepik
Así, es importante controlar los niveles de colesterol, algo que podemos conseguir haciendo ejercicio físico, practicando técnicas de relajación, y también con la alimentación.
Los alimentos que ayudan a reducir el cortisol y el estrés
Como decíamos, la dieta juega un papel importante a la hora de reducir los niveles de cortisol. Y es que, al igual que encontramos alimentos que ayudan a bajar los niveles de la llamada ‘hormona del estrés’, también otros los aumentan.
Entre los alimentos que ayudan a reducir los niveles de cortisol están aquellos con alto contenido en omega 3. Es el caso de los pescados grasos como el salmón o el atún; las nueces; o las semillas de chía.
También nos pueden ayudar los alimentos ricos en magnesio, un mineral esencial que ayuda a calmar el sistema nervioso, que lo podemos encontrar en alimentos como las almendras, las espinacas, el aguacate o las semillas de calabaza.
Otros alimentos eficaces para reducir los niveles de cortisol son las frutas y verduras, ricas en antioxidantes y vitamina C, como los arándanos, las fresas o las granadas.
Las frutas y verduras son algunos de los alimentos que ayudan a reducir los niveles de cortisol. Foto: Pvproductions en Freepik
No pueden faltar en nuestra dieta los alimentos ricos en triptófano, un aminoácido esencial, precursor de la serotonina, la hormona de la felicidad. Y es que, cuando tenemos unos niveles adecuados de serotonina, se puede contrarrestar el efecto negativo del cortisol. En este grupo encontramos el pavo, los huevos, el plátano, las nueces y las legumbres.
Los alimentos ricos en zinc también nos pueden ayudar a controlar el cortisol, como las semillas de sésamo o de calabaza, las almendras, los cacahuetes o los anacardos; al igual que los ricos en probióticos, como el yogur o el kéfir.
Por el contrario, hay otros alimentos que debemos evitar ya que aumentan el cortisol y empeoran nuestros niveles de estrés. Es el caso de los alimentos con azúcares refinados; las bebidas alcohólicas, que afectan a los niveles hormonales; y la cafeína que, en grandes cantidades, estimula el sistema nervioso y aumenta el cortisol.