Más medallas para España. Otra vez en el foso. Lester Lescay, de origen cubano que compite como atleta nacional desde enero de este mismo año, ha conseguido su primera medalla en un Campeonato de Europa. Se podría apuntar además a eso de "Apeldoorn ha visto nacer a una estrella", puesto que Lescay tiene 23 años y su proyección de cara al futuro es deslumbrante. Pero no hace falta mirar más allá de momento: Lester es uno de los mejores del continente en el salto de longitud, donde este jueves ha conseguido una marca de 8.12m para colgarse el bronce.
Era la novena potencia en el ránking europeo, con tres rivales preclasificados por encima de él y con una mejor marca personal de 8.35m. Además, los resultados de la clasificatoria no acompañaban al deportista recientemente nacionalizado, que logró meterse entre los ocho mejores de la prueba llegando tan solo hasta los 7.81m este pasado jueves. Pero en una final de atletismo puede pasar de todo. Es más, hasta el penúltimo salto, Lester estaba en lo más alto de la clasificación. Después, apostó por no jugársela y conformarse con un gran bronce continental disputado bajo techo.
Lester Lascay da más 'guerra' en Europa que Jaime
No será que falta de méritos propios, pero España había logrado colar entre los ocho mejores saltadores de longitud del continente a dos de los suyos. Unas palabras mayores. Y a partir de ahí a soñar en grande. Jaime Guerra y Lester Lescay, al igual que el gran favorito, el italiano -vigente bronce olímpico- Mattia Furlani, empezaron con sendos nulos en su primer salto sobre un foso que previamente había visto coronarse campeona a Ana Peleteiro. Algo auguraba pues la competición. Eso sí, al siguiente intento se pusieron las pilas los tres: Lescay se colocó líder (8.12m) por delante de un Furlani algo abrumado (8.10m) y del samboyano (8.06m). Pintaba bien.
Lester Lescay celebra en Apeldoorn su reciente medalla de bronce continental | RFEF
Pero este fue el único salto que Lester arriesgó -compitiendo con molestias y con un enorme y vistoso vendaje en el muslo izquierdo-, olvidándose entonces del dolor y apuntando a las medallas cuando más complicado parecía. El subcampeón del Mundo Sub18 comprobó cómo todos sus rivales se repartían saltos nulos en mayoría y aquellos que lograban talonar mejor en la tabla ni siquieran se acercaban a los ocho metros. Solamente el portugués Gerson Baldé, medalla de plata hasta el quinto salto, asustó al español brincando 8.07m. Pero Lester reposaba tranquilo.
Fue a partir del quinto intento cuando la cosa empezó a torcerse (para las aspiraciones nacionales y de Lester) y cuando Furlani decidió darle algo de vida a una final que se empezaba a estancar. El italiano se sacó de la manga entonces un salto de 8.09m para colocarse por delante de Lescay y arrebatarle un oro con el que estrenaría nacionalidad por todo lo alto. Pero para mayor inri, Lester tampoco pudo saborear la plata. Segundos después, puesto que en el corte del tercer salto, el búlgaro figuraba séptimo y saltaba prácticamente a continuación de Furlani, Bozhidar Saraboyukov lograría levantar al Omnisport saltando 8.13m. Primero.
La sorpresa de la joranda en mayúsculas y otro revés más para Lester, que tuvo que conformarse finalmente con el bronce europeo en su esperado debut con España.
"Salté a corazón. Ahora no puedo ni andar, pero estoy muy contento con mi primera medalla para España", apuntaba después Lester en zona mixta. Quién no pudo terminar su participación, realizando además cinco saltos nulos a parte de esos 8.06m anteriores fue Jaime Guerra. Los 8.14m con los que se impuso en el Nacional disputado en Madrid hace una semana, su segunda mejor marca personal, le valían para asaltar la primera plaza, más de intentarlo cayó lesionado. En el último intento algo se resintió en los isquiotibiales de su pierna izquierda y tras marcar un salto nulo, el barcelonés quedó tendido sobre la arena con ostensibles gestos de dolor. Las asistencias médicas le atendieron de inmediato y fue retirado en camilla dejando una durísima imagen que contrastaba con la alegría de Lester Lescay en Países Bajos.
Jaime Guerra durante el calentamiento de la final de salto de longitud | RFEF
España cierra así la primera jornada de finales del Europeo indoor con dos medallas en su haber: una de oro y otra de bronce; en tercer lugar. Solamente lo superan las delegaciones de Francia que suman cuatro preseas en total y la de la anfitriona, que ocupa el mismo número de medallas pero una de ellas es de plata -y la de oro-.
La lesión de Llopis, clave en la final de los 60m vallas
Las semifinales de los 400 metros fueron las primeras en exhibirse tras la final del triple salto femenino donde Peleteiro se colgó el oro. En la primera serie femenina, Paula Sevilla venció con un tiempo de 51.23 y confirmó sus buenas sensaciones para la carrera decisiva mientras que Eva Santidrián, quien competía en la semifinal restante, fue tercera por momentos pero concluyó quinta con un tiempo de 52.82.
En esta misma distancia, Markel Fernández comenzó con buen pie la primera manga masculina, luego cedió posiciones tras un toque con el portugués João Coelho y su remontada 'in extremis' le sirvió para acabar cuarto (46.82), un puesto insuficiente para avanzar a la final. Sin embargo, al contrario que ocurrió con la prueba femenina, la alegría en la delegación española llegó después con la carrera de Iñaki Cañal, quien terminó segundo (46.24) y estará en la final que se disputará este mismo sábado.
Una breve pasada por el foso devolvió el foco al tartán, en aras de la final femenina de 1.500 metros. Esther Guerrero era la única española y desplegó un plan para situarse en el grueso del 'pelotón' en todo momento. Pese a la sorpresa de ver cómo la británica Georgia Hunter Bell cedía terreno, la corredora bañolense no logró remontar lo necesario y acabó quinta (4:09.45). La sa Agathe Guillemot se adjudicó la medalla de oro en el 'milqui' (4:07.23) y la portuguesa Salomé Afonso ganó la plata (4:07.66), mientras que la otra británica, Revee Walcott-Nolan, se colgó el bronce en los mismos 4:08.45 de su compatriota, ganando esta en milésimas.
Esther Guerrero se lleva un quinto puesto del Europeo de Apeldoorn | RFEA
El podio masculino se decidió justo a continuación, con el laureado noruego Jakob Ingebrigtsen en la cima gracias a su registro de 3:36.56. Tras él se encomendaron el francés Azeddine Habz (3:36.92) y el portugués Isaac Nader (3:37.10), merced a una final accidentada por la caída del alemán Robert Farken y con un ritmo muy exigente.
Por último, paralelamente a la final de salto, las dos finales homólogas de los 60m vallas tomaban partida. Primero se celebró la femenina, sin representación femenina y consagrando como campeona a la suiza Ditaji Kambundji (7.67), batiendo esta el récord de Europa y proclamándose además como líder mundial del año. Después llegaron los chicos y si bien esta edición era histórica para España, con hasta tres representantes clasificados por primera vez para una prueba final, uno de los grandes favoritos decidió no correr por su calle. Quique Llopis, cuarto en los Juegos de París 2024, notó molestias en el entrenamiento y decidió no correr una final que celebró la victoria del polaco Jakub Szymanski (7.43). Los otros dos españoles, Abel Jordan y Asier Martínez, cerraron en cuarto (7.54) y séptimo (7.68) lugar, respectivamente.