Jordi Pujol

Una cosa es defender a Laura Borràs y otra parecer el matón que la protege, según se desprende de cuanto ahora lo que se ha publicado

Sorprende la pastueña paciencia de los cronistas de la actualidad catalana ante los reiterados insultos de los manifestantes independentistas. “Prensa española, manipuladora” surge como un bordón cada vez que distinguen

El separatismo usa siempre frases grandilocuentes, escogidas, calculadas. La lengua, tabú que consolida y calafatea su ideario, se vuelve, sin embargo, barriobajero cuando creen que nadie los escucha. El artificio

Quim Torra ha pedido disculpas por sus tuits. Es una constante del nacionalismo catalán: primero la ofensa, luego la disculpa. Falsa disculpa. Porque si afinamos la mirada, repararemos en que perdón, lo que se dice perdón, no pide nadie