La pandemia del covid-19 no solo dejó las mascarillas como principal 'recuerdo' de su paso, sino también un aumento exponencial de los contagios de sarna. Aunque esta enfermedad cutánea ya estaba en nuestro país antes del confinamiento, fue tras aquellos meses cuando su presencia se acentuó debido al aumento progresivo del o social. Durante el último mes, hemos vivido en varias provincias el último gran brote de esta dolencia.
Mallorca ha sido el último sitio donde se ha producido un gran aumento de casos: el Servicio de Epidemiología de la Conselleria de Salud ha detectado 16 brotes que han afectado a 96 personas este año. Es exactamente el doble que en 2021, que registró 8 brotes. Además, la estimación es que haya más casos sin notificar. Antes que la isla, ha habido otros puntos de España con un crecimiento de esta afección: en octubre fue el turno de País Vasco o en una residencia universitaria de Salamanca.
Cataluña ha mostrado su preocupación al respecto, ya que en los primeros seis meses de 2022 se notificaron los mismos casos que en año 2019 completo, según informó la Agencia de Salut Pública de Barcelona (ASPB). Una tendencia al alza que se observa desde 2014, tal y como refleja el estudio '¿Sarna en España">como cárceles o residencias, también se produzcan de forma ocasional grandes brotes.
Sin_Perdon
Una enfermedad prácticamente extinguida en nuestro país que, gracias a los "nuevos" españoles, ya es casi una epidemia. Consecuencias de las fronteras abiertas.