La querella que Juan Carlos I ha presentado contra el expresidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, guarda muchas claves que apenas saben media docena de personas. Su núcleo más cercano. Sus confidentes desde que fue apartado de la vida pública y repudiado por el Gobierno y su propia familia.
Fuentes cercanas al Rey emérito consultadas en las últimas horas por Vozpópuli, tras conocerse la decisión de Juan Carlos I, señalan que la decisión de litigar contra Revilla es un "aviso a navegantes" ante su inminente regreso a España. El calendario que barajan pasa porque su vuelta a nuestro país, posiblemente a Barcelona o Galicia, alejado del Palacio de la Zarzuela, se produzca alrededor del verano.
El padre de Don Felipe, que se instaló en Abu Dabi en agosto del año 2020, cuando se estaba investigando su fortuna, en una causa que se acabó archivando, tiene decidido que "no quiere pasar sus últimos días en el extranjero". Él mismo, en los últimos días, habría comunicado a su grupo de amigos más cercanos que quiere instalarse de nuevo en nuestro país.
Correctivo y advertencia
Según ha expresado el que fuera jefe del Estado durante casi 39 años a los suyos, la decisión de querellarse contra Revilla, con el que tuvo una intensa amistad durante su reinado, es a modo de correctivo y advertencia. Para que nadie, una vez viva de nuevo en España, tenga la tentación para descalificarle.
No obstante, según reconocen también algunos de los allegados a Juan Carlos I, el recorrido que puede tener la querella es muy limitado, ya que algunas de las afirmaciones del expresidente cántabro pueden ampararse en el marco de la libertad de expresión. Aun así, añaden, "ya están avisados de que no todo vale". Que "no todo es tolerable".
Revilla lo considera "injusto y mezquino"
El expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla consideró "injusto y mezquino" que una persona "inviolable" e "inmune" ante la ley como es el rey emérito demande a "un ciudadano de a pie" que no ha dicho "nada que no sea verdad", y se ha preguntado por qué se querella contra él "y no contra Bárbara Rey o Corinna" que han dicho "cosas muy gordas" sobre Juan Carlos I.
Revilla indicó este miércoles que lo primero que pensó al conocer por la prensa la reclamación del rey emérito es que "era un bulo", hasta que su mujer le aseguró que "era cierto". Se enteró este martes cuando se encontraba en Vitoria participando en el rodaje de una película con el actor cántabro Antonio Resines y justo filmando una escena en la que estaba "vestido de juez".
El expresidente aseguró que aún no ha recibido ninguna notificación judicial al respecto, pero que el asunto se dirimirá en los juzgados ordinarios, ya que ha recordado que "no es un aforado", condición que no tienen los diputados del Parlamento de Cantabria desde 2021. "Soy un ciudadano más", ha dicho.
Juan Carlos I reclama al expresidente de Cantabria 50.000 euros por unas declaraciones "injuriosas" que habría realizado en medios de comunicación entre mayo de 2022 y enero de 2025, bajo amenaza de demanda, si bien como paso previo ha solicitado un acto de conciliación ante los juzgados de Santander.
aherraiz
03/04/2025 14:01
No me gusta Juan Carlos pero el REVILLA si tu viera alguien que le quisira le impediria a ir a las tves a hacer el ridiculo y soltar sandeces ,la edad no perdona