“Sola, fané y descangayada, te vi esta madrugada salir de un cabaré…” Así arranca 'Esta noche me emborracho', aquel tango inmortal de Enrique Santos Discépolo, “el filósofo del tango”, cantado como los dioses por Carlos Gardel. Y francamente, así podríamos describir a Europa hoy: sola, golpeada y con más remiendos que soluciones. Un continente que alguna vez deslumbró al mundo y que ahora parece una dama que ha vivido tiempos mejores, con el maquillaje desteñido y la dignidad en saldo.
La Unión Europea, que nació para ser un bloque fuerte y cohesionado, hoy es un grupo político que recuerda más a una orquesta desafinada: todos tocan, nadie se escucha y el bandoneón suena como si estuviera muriendo en cámara lenta.
“Y pensar que hace diez años fue mi locura” decía aquel tango, y podría ser parte de mi reflexión, tan solo una década bastó para acelerar una debacle inexplicable. Europa tiene hoy un problema existencial: ¿seguir dependiendo de Estados Unidos o aprender a valerse por sí misma? Hoy está llena de Chamberlains, justo cuando más Churchills necesita. Donald Trump, con su diplomacia sutil como una patada en el pecho, ya dejó claro que la OTAN no puede seguir siendo el guardián absoluto de la seguridad europea.
Y ahí entra Zelenski. En teoría, Europa debería defenderlo a él. Pero en una escena más propia de una comedia de enredos que de la geopolítica actual, es él quien parece estar defendiéndola. Y no, señores, esto no es un mal guion: es la triste realidad de un continente que todavía no se decide a tomar las riendas de su propio destino. Europa tiene que recordar cómo defendió su estilo de vida en la segunda guerra mundial. Ahí están las enseñanzas.
Europa se ha dejado penetrar militar, cultural y económicamente por cualquiera que pasara por Bruselas con una sonrisa y un contrato seductor. Mientras tanto, Alemania ya no es la potencia que solía ser, Francia finge liderazgo, pero no se anima a tomar el timón, y España…bueno, va en contramano, con el mapa roto, mientras su GPS político grita: ¡recalculando! Ursula von der Leyen, por su parte, ya es pura pintura. Literal y políticamente. Es la típica muñeca de vitrina, de esas que se ven lindas hasta que te acercas y notas que los hilos que la sostienen están más expuestos que nunca. Mientras Europa insista en gobernarse con títeres, caerá definitivamente en el abismo al que se asoma hoy en día.
La imagen que está dando es patética. Como en el tango, se le nota la decadencia, el paso del tiempo mal llevado, la resaca de decisiones que la han llevado al lugar donde está hoy
Europa tiene que olvidar su pasado de gloria y aceptar su presente sin anestesia. Porque el mundo ha cambiado y la nostalgia no paga las cuentas. O se reinventa, o termina como la protagonista del tango: “sola, fané y descangayada”, esperando que alguien la rescate de un cabaret geopolítico donde ya nadie la invita a bailar. Ni siquiera la foto de Londres convenció a Zelenski de que podía confiar en sus vecinos europeos y volvió al diálogo con Trump como reaseguro, a pesar de sus pesares.
En el tango, el protagonista le recuerda a su antigua amante todo lo que le dio, todo lo que hizo por ella. Los europeos deberían hacer lo mismo: recordar lo que alguna vez fue este maravilloso continente y preguntarse en qué momento dejó de ser la gran dama del mundo para convertirse en un personaje secundario en su propia historia.
Hoy tiene dos caminos: aceptar con dignidad su decadencia o pelear por recuperar su grandeza. Pero la historia no suele ser amable con los que dudan demasiado. Y mientras sigue tambaleándose, todavía vestida con los harapos de su antigua gloria, el mundo avanza sin esperarla. Como en el tango, debería tener presente que “es fiera venganza la del tiempo”, que no tiene piedad con los que viven de recuerdos.
N de la R: El término “fané”, viene del “lunfardo”, una jerga argentina, y en su diccionario la definición es: Arruinada, desgastada, deteriorada, vieja, venida a menos.
kjlm10
06/03/2025 10:04
Las relaciones internacionales han vuelto a donde siempre estuvieron: 'el interés'. Durante tiempo pensaron que las relaciones basadas en 'reglas' como respetar las fronteras y no inmiscuirse en los asuntos del vecino pondrían orden. Trump/USA y Putin han puesto de manifiesto que todo era cartón/piedra y que debajo permanecía el interés. Para que la UE se acomodara a los tiempos, Von der Leien debería dimitir y dar paso a otra Comisión Europea. Es que Von der Leien tiene pasado. Von der Leien es la chica de Merkel, que a su vez fue chica de Helmut Kohl. En el año 2000 hubo un enfrentamiento en el seno de la CDU, por un lado Merkel alcanzó la presidencia del partido con el apoyo de Kohl y por otro Merz (el actual) se hace con la presidencia del grupo parlamentario. Normalmente el presidente del partido es el candidato a canciller de la CDU, pero Merz dijo que el candidato podría ser otro, por ejemplo el presidente del grupo parlamentario (o sea él). El enfrentamiento termina con que Merkel se hace con la candidatura y sale elegida. Desde ese momento Merz pierde poder y va siendo apartado y en 2009 deja la política. Cuando Merkel anuncia que se va, Merz vuelve y presenta su candidatura a presidir la CDU y gana. Así que tenemos dos enemigos mortales enfrentados: uno Von der Leien, la chica de Merkel, otro Merz al que Merkel tiró de la política. Es que Merkel, Von der Leien son los que introducen en la UE las agendas verdes, 2030 o el Wokismo y el 'buenismo'. Lo cierto es que una Europa donde los actores que toman decisiones son Von der Leien, Merz, Macron, Meloni, Sanchez, Orban, y demás es una Europa totalmente disfuncional, sin capacidad de alcanzar un liderazgo que se necesita en este momento. Si Von der Leien no se va, veremos como los estados europeos aceptan jugar por su 'interés' y no por 'las reglas', es decir la EU se debilitará. Pero viendo que la EU no salva a nadie y se hunde, los diferentes países trataran de salvarse por su cuenta. Y España? pobre España bajo la bota de comunistas, secesionistas y antes-terroristas con la colaboración del PSOE. Parece que el 'interés' de España ha dejado de jugar en el tablero internacional, para dar paso al 'interés' de las diferentes autonomías. Para temblar. Unas verán su interés en USA, otras en Rusia, y hasta las habrá que vean su interés en China
En1958
06/03/2025 12:15
Espero, sinceramente, que el futuro de Europa no dependa del líder de un régimen neonazi impuesto tras un golpe de estado. Por cierto, el mundo basado en reglas nunca existió, era la falsedad establecida por la élite liberal-progresista de la hegemonia anglosajona para imponer al mundo sus normas mediante reglas que adaptaban y respetaban o no según le conviniera. Lo que veo es que, perdido el poder del progresismo woke en EEUU, este no se resiste a morir y, de forma patética, empuja a los pocos líderes europeos fieles la ideología, que nos lleva arruinando décadas, a que sigan apoyando y financiando la guerra proxy contra Rusia y su alineamiento con el, cada día más evidente, futuro multipolar.