La Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (LIBE) del Parlamento Europeo aterriza la próxima semana en El Hierro con una misión clara: observar de primera mano cómo se está gestionando en las islas la presión migratoria que, lejos de remitir, se ha intensificado en el primer cuatrimestre del año.
La visita de los eurodiputados llega en un momento de tensión institucional. Si bien el Gobierno de España ha defendido su actuación, varias ONG y istraciones locales han denunciado saturación en los recursos de acogida, dificultades logísticas y falta de previsión. Nadie del Gobierno central vendrá desde Madrid al encuentro con la delegación del Europarlamento y la representación quedará en manos de la Delegación del Gobierno en las islas.
En 2023, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, entonces en funciones, dijo que El Hierro no se iba a convertir en la nueva Lampedusa en una comparecencia precisamente ante la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo. A esto, el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, respondió que las manifestaciones del ministro sobre los recursos para atender a los migrantes son "estupideces".
Tras eso, hubo una crisis entre ambas istraciones y Marlaska visitó Canarias en octubre de ese 2023 para presidir una reunión de la Autoridad de Coordinación frente a la Inmigración. Tres años antes, en enero de 2020, meses antes de la alerta nacional por Covid19, el entonces presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, actual ministro de Política Territorial, fue a Madrid para pedir a Grande Marlaska, "medidas suplementarias" para atajar el aumento en el flujo de migrantes hacia las islas, entre ellas, agilizar los procesos de devolución a los países de origen.
Canarias se encuentra de facto en la primera línea de la política migratoria europea, con una gestión descentralizada pero sin competencias plenas, una mezcla que dificulta una respuesta coordinada. Desde la Unión Europea se reconoce la singularidad del caso canario, pero aún no se ha articulado una política específica para las regiones ultraperiféricas en materia de migración irregular. La llegada creciente de perfiles tradicionalmente ajenos a esta ruta podría cambiar ese enfoque.
Los eurodiputados también mantendrán un encuentro con la fiscal responsable de los menores no acompañados en El Hierro y con el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Juan Luis Lorenzo Bragado.
Oleada de inmigrantes en Canarias
Más de 10.500 personas han llegado en pateras o cayucos a costas canarias en lo que va de 2025, y la tendencia no solo no ha decrecido, sino que ha alarmado a Bruselas por el perfil de las nuevas llegadas: ciudadanos de Siria, Afganistán o Pakistán, rutas tradicionalmente asociadas al Mediterráneo o los Balcanes, comienzan a utilizar el Atlántico como pasillo de entrada a Europa. El cambio de patrón ha hecho saltar las alarmas.
La delegación europea mantendrá una intensa agenda de trabajo en Tenerife y El Hierro, con encuentros de alto nivel junto al presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y el del Cabildo herreño, Alpidio Armas (PSOE). También han sido convocados los alcaldes de los tres municipios herreños: Valverde, La Frontera y El Pinar.
El programa incluye además reuniones con representantes de Frontex y de la Agencia de Asilo de la Unión Europea (EUAA), así como una visita institucional a centros de atención a migrantes, donde se abordará la situación especialmente sensible de los menores no acompañados. En este ámbito se prevé un encuentro con la fiscal responsable de estos casos en El Hierro y con el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Juan Luis Lorenzo Bragado.
La misión estará liderada por el presidente de la Comisión LIBE, el español Javier Zarzalejos (PPE), y contará con una delegación amplia y plural. Estarán presentes la secretaria general del Partido Popular Europeo, Dolors Montserrat, y el eurodiputado canario Gabriel Mato. Desde el grupo socialista (S&D) participarán Juan Fernando López Aguilar —canario y exministro de Justicia de Rodríguez Zapatero— y la italiana Cecilia Strada. La liberal sa Fabienne Keller representará a Renew Europe.
La derecha más crítica con las políticas migratorias también ha confirmado su presencia: el grupo Patriots for Europe enviará al español Jorge Buxadé y al checo Nikola Bartûšek, mientras que Nicolas Bay, acompañado por Diego Solier, acudirá por los Conservadores y Reformistas (ECR).
El Partido Popular ha insistido en la necesidad de reforzar la vigilancia, aumentar la cooperación con los países de origen y tránsito, y acelerar los mecanismos de retorno. Pero la realidad de los nuevos flujos, en su mayoría personas susceptibles de protección internacional, complica cualquier fórmula basada solo en el control fronterizo.
