El PSOE, principal partido del Gobierno de coalición que lidera Pedro Sánchez, lleva meses enfrascado en una espiral de corrupción, caos y falta de apoyos que está dinamitando la legislatura. Con el segundo aniversario del 23-J a la vuelta de la esquina, la debilidad política y parlamentaria de Moncloa es más que evidente.
El último gran escándalo que ha azotado Ferraz estas semanas ha sido la publicación de los WhatsApp intercambiados entre Pedro Sánchez y José Luis Ábalos, exministro de Transporte y ex secretario de organización del PSOE.
Hasta su caída en desgracia, Ábalos fue la mano derecha del presidente, un hombre fuerte del partido socialista que tejía cada hilo. Dichos mensajes, publicados en exclusiva por El Mundo, han demostrado las malas formas y el verdadero carácter del secretario general del PSOE.
Las palabras de desprecio y las tácticas de presión hacia otros barones como Emiliano García-Page y Javier Lambán son la punta del iceberg de un Sánchez absolutamente a la deriva. Otra de las grandes perjudicadas fue la ministra de Defensa, Margarita Robles, a la que Sánchez tildó de "pájara".
Al margen de los mensajes sobre el rescate de Air Europa, que es un caso con largo recorrido judicial por delante, la imagen de Sánchez ante las bases del PSOE parece haberse deteriorado. Como parte de una macroencuesta realizada por Hamalgama Métrica para Vozpópuli, analizamos el impacto que estos mensajes han tenido en el seno de la formación socialista.
Los WhatsApp de Sánchez con Ábalos le pasan factura
El 50,8% de los ciudadanos españoles encuestados consideran que los mensajes filtrados entre Sánchez y el exministro de Transportes provocarán una pérdida de apoyos entre las bases del PSOE. El 39,9% se muestra más escéptico y cree que no habrá peaje alguno para el presidente a nivel interno. Por último, el 9,3% no tiene una opinión al respecto.
Por franjas de edad, la cosa está más pareja. Los españoles entre 18 y 29 años creen con un 45,9% que los WhatsApp sí le pasarán factura a Sánchez. El 40,5% no lo cree así, y el 13,6% evita 'mojarse'.
Los adultos de entre 30 y 44 años son más contundentes con un 51,1%, dejando el NO en 43,1% y el NS/NC en el 5,7% restante.
La franja de encuestados entre los 45 y los 64 años está en datos similares. El 54% considera que los mensajes de WhatsApp le saldrán 'caros' a Sánchez entre las bases del PSOE; el 40,8% no, y el 5,2% no sabe qué opinar al respecto. Por último, los mayores de 65 años creen en un 53,2%, mientras que el 34,3% no lo estima oportuno y el 12,5% se abstiene de responder con claridad.
Los votantes del PSOE siguen fieles al 'líder'
En el último apartado de la encuesta se encuentra la opinión de los españoles según su afiliación político. En el caso de los adeptos al Partido Popular, el 80,8% sí cree que los mensajes con Ábalos poniendo a los pies de los caballos a medio PSOE pasarán factura a Pedro Sánchez. El 7,7% no lo cree así y el 11,5% no termina de tener una idea clara al respecto.
Siguiendo en la derecha, los votantes de Vox son aún más contundentes apostando, en un 88,9%, que estos WhatsApp deben crear asperezas en el seno interno de Ferraz. El 11,1% no lo cree así.
En la izquierda, el panorama crítico brilla por su ausencia. Los votantes del PSOE no creen que esto vaya a tener un impacto en la imagen de Sánchez en un 76,5%, mientras que 11,8% sí lo ve de este modo y otro 11,8% NS/NC.
Por último, el 71,4% de los encuestados de Sumar tampoco cree que estos mensajes con Ábalos puedan repercutir en el liderazgo de Sánchez en el PSOE, y el 28,6% sí opina que debilitará su estatus en la cúpula del partido socialista.
lepanto_2_0
26/05/2025 08:16
Al Juego de Tronos partidista en que la clase política dirigente ha convertido la vida pública, sólo le falta el "salseo" de las macroencuestas que diversas empresas y el propio CIS lanzan sobre la opinión pública constantemente, en un bombardeo permanente de porcentajes y datos difíciles de interpretar, que más que ayudar a entender los flujos de estados de opinión existentes, sirven para perpetuar una situación de confusión que no ayuda en nada a que la ciudadanía tenga una perspectiva real de lo que está ocurriendo. Quizás este sea el objetivo. Ni Sánchez va a finiquitar la legislatura con un adelanto electoral mientras a Puigdemont le interese mantenerlo en Moncloa, pase lo que pase y caiga quien caiga; ni al resto de sus 'socios' les mueve ética política alguna para dejarlo caer y menos por los casos de presunta corrupción que cercan al Ejecutivo: nunca ha sido así, ya que sólo les mueve el interés partidista y cuando esgrimen sus escrúpulos ante casos de corrupción sólo lo hacen como justificación pantalla para esconder sus verdaderos intereses. Este sistema de partidos actual, que ha secuestrado a la democracia española y expulsado a la ciudadanía de sus derechos como depositaria de la soberanía nacional, está totalmente obsoleto, aunque se resista agónicamente a continuar degradándose hasta límites peligrosos. El propio funcionamiento interno de los mismos es un lastre insalvable para que puedan dar la respuesta necesaria que el sistema político requiere para garantizar una democracia plural, participativa y garante de los principios rectores de nuestra Carta Magna: la libertad, la justicia, la solidaridad, la igualdad y la unidad. Pueden darle todas las vueltas que quieran a estos datos. Mañana amanecerá con más de lo mismo o peor. Y recuerden ... una democracia sólo puede ser salvada por el pueblo. Sin acción no hay movilización y sin movilización no hay posibilidad de que se produzcan cambios. La situación política actual en nuestro país requiere de un cambio radical y profundo: requiere de una auténtica revolución. Una revolución que debe ser necesariamente cívica, pacífica y democrática; pero firme, decidida y comprometida. «Sin Revolución no hay Solución».
MataNarcisos
26/05/2025 09:35
JAAAjajaja..... Bastante le importa al sujeto esa opinión de la ciudadanía, solo prevalece una cuestión, él, solo él, nada más que él. Otra cuestión en si un día acaba delante de un Tribunal, cosa muy factible, entonces entre su casita en Pozuelo de Alarcón, y la celda de la Prisión, si optará por la primera.