Economía

Un increíble fondo de renta variable europea con enfoque value

En un universo financiero cada vez más plagado de productos clónicos, encontrar un fondo de inversión que tenga personalidad propia es difícil

Reconozco que no lo he encontrado yo. Me lo descubrieron desde Capital Strategies Partners. Y os cuento un poco del fondo. Por resumir, es un fondo de renta variable europea muy concentrado, de alta convicción, con un enfoque value. 

Podríamos empezar este análisis con sus cifras de rentabilidad a 5 años (¡más del 24% anualizado!), o su calificación de cinco estrellas Morningstar, o incluso con su outperformance frente al índice de referencia (MSCI EMU NR EUR) en años especialmente complicados como 2022. Pero preferimos empezar por lo que no se ve: la convicción.

Fuente: Morningstar Direct

Con apenas 26 valores en cartera, y casi un 47% del patrimonio en el Top 10, este fondo no tiene complejos a la hora de concentrar apuestas. Es como el chef que dice: no tengo 50 platos en carta, pero los que hay, están bien pensados y mejor cocinados. Tan bien cocinados que, si lo comparamos con el mercado de renta variable europea, se sale de los cuartiles…

Fuente: Morningstar Direct

En 2022, año de caídas generalizadas, el fondo consiguió una rentabilidad positiva del 7,8%, mientras su índice caía más de un 12%. No estamos hablando de evitar el golpe. Estamos hablando de convertir una tormenta en una oportunidad. 

El estilo de inversión del fondo es value puro: busca compañías infravaloradas dentro de la Eurozona con potencial de revalorización. Pero atención: esto no significa que inviertan en lo que está barato sin más. Lo que hacen es buscar valor donde otros no miran. De hecho, su exposición sectorial está cargada de lógica: financieras, consumo cíclico, materiales básicos… sectores que no siempre brillan, pero que cuando lo hacen, marcan la diferencia. De hecho, imagina que hay acuerdo comercial con Estados Unidos, termina la guerra de Ucrania y siguen sólidos los resultados empresariales y macroeconómicos. No digo que vaya a ser así, pero imagino que el fondo volaría más aún de lo que lo está haciendo. Y lo que es aún más interesante: mientras el índice pondera mucho en mega caps, este fondo se reparte de forma más equilibrada entre large y mid caps, lo que añade flexibilidad y potencial de revalorización.

Otro de los puntos fuertes es su perfil de riesgo-rentabilidad. Tiene una desviación típica elevada (más de un 15%), pero esto se explica por su elevada concentración. Es decir, asume riesgo, pero elige en qué batallas meterse. Y lo hace con cierto éxito, viendo la ratio de Sharpe y las capturas positivas de mercado en los últimos tres años.

Además, su PER medio es de apenas 10,8 veces beneficios, frente a las 15,7 del índice. Esto indica que el fondo está invertido en compañías que cotizan a múltiplos muy atractivos, con potencial de crecimiento y sin pagar sobreprecio por modas pasajeras.

Aunque el estilo del fondo no se presenta como ESG puro, cumple con los estándares del artículo 8 del SFDR. Incorpora exclusiones y evalúa el impacto sostenible en la construcción de cartera. Tiene un nivel de riesgo climático controlado y un impacto reducido en actividades controvertidas, lo que lo hace una opción sensata para inversores que quieren rentabilidad sin renunciar a ciertos criterios éticos.

Algunas de sus posiciones principales son Aegon, Societé Generale, Randstad, o Bayer. Por cierto, que Societé lleva a un año más de un 93% de subida. 

En un entorno de geopolítica inestable con curvas macroeconómicas que más bien parecen montañas rusas, y con muchas carteras sobrecargadas de tecnología o temáticas de moda, tener en cartera un fondo como el DIVAS Eurzone puede ser un acierto. No solo por su rentabilidad histórica, sino por su estilo de gestión con personalidad y convicción.

Aprende a invertir en bolsa y mercados financieros

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli