En un contexto de desafíos crecientes en el negocio postal, Correos ha anunciado importantes medidas de transformación. La compañía alcanzó un acuerdo con la mayoría sindical en la primera fase de su Plan Estratégico 2024-2028, mediante el que se definirán acciones para adaptar y redistribuir su plantilla a nuevas iniciativas de negocio. Entre estas medidas se destacan un plan de excedencias voluntarias e incentivadas para el personal funcionario y la desagrupación de centros, garantizando de este modo la protección del empleo durante el proceso de reestructuración.
Este acuerdo, firmado antes de la fecha límite establecida, forma parte de un ambicioso proyecto que busca modernizar la operativa de Correos y diversificar sus fuentes de ingresos. En paralelo, se ha informado que la empresa tiene previsto cerrar 40 centros logísticos que actualmente generan pérdidas anuales superiores a 30 millones de euros, una decisión que apunta a racionalizar la red operativa y concentrar recursos en áreas estratégicas.
La doble estrategia –asegurar el empleo mediante pactos sindicales y cerrar centros no rentables– refleja el esfuerzo de Correos por adaptarse a la nueva realidad del mercado, marcado por la digitalización y la disminución de la actividad tradicional postal. Según fuentes de Vozpópuli, estos recortes son esenciales para mejorar la rentabilidad y garantizar la viabilidad de la compañía a largo plazo.
Correos y los sindicatos han establecido el 30 de junio como fecha clave para la segunda fase de negociación, en la que se definirán aspectos fundamentales del nuevo Convenio Colectivo y el Plan de Personas. Estos acuerdos serán decisivos para consolidar el proceso de transformación, permitiendo a la empresa redirigir sus inversiones hacia la modernización tecnológica, la internacionalización y la ampliación de servicios comerciales y esenciales que contribuyan a la cohesión social y territorial.
En definitiva, la reestructuración de Correos se presenta como un reto mayúsculo, pero también como una oportunidad para evolucionar hacia un modelo de negocio más sostenible y competitivo. La combinación de medidas para proteger el empleo con la eliminación de infraestructuras obsoletas podría marcar un antes y un después en la historia de la empresa pública, apostando por un futuro en el que la innovación y la eficiencia sean clave para superar la actual crisis en el sector postal.
Messidor
16/03/2025 18:33
Que lo cierren del todo o que lo privaticen. Ya está bien de macropesebres para enchufados que nos cuestan millonadas y no nos sirven para nada a los contribuyentes que los pagamos obligatoriamente.
lepanto_2_0
16/03/2025 19:08
No hay que preocuparse, si todo depende de llegar a acuerdos entre los "comegambas" y el gobierno que los riega abundantemente con subvenciones, no hay de qué preocuparse. La ciudadanía cosida a impuestos y esta patulea de vividores a costa ajena, a pegarse la vidorra padre sin el más mínimo rubor. Esta es la España de clientelismos y regalías del Pinocho de Tetuán. Y recuerden... Nuestra democracia sólo puede salvarla el pueblo. Sin movilización activa no hay solución.
Talleyrand
Las premisas de ETA Tantos muertos para ser traicionados por los de siempre
fmoz
16/03/2025 20:13
Como todo lo que toca Sánchez, otra ruina más. Da igual las soluciones que tomen mientras él y sus aduladores revoloteen de flor en flor, de empresa en empresa, saqyendo
fmoz
16/03/2025 20:16
Saqueando y arruinando nuestro futuro. Sin revolución no hay solución. Va siendo el momento de que se escuche al pueblo español
aherraiz
16/03/2025 20:47
Lo pacta con los Sindicatos ,pero si son los mismos osea pacta y el ruinoso Presidente que era su amigo de presidente en Autopistas para .......trincar
yoshimi-san
16/03/2025 21:03
Correos y el servicio que ofrece, es una verdadera vergüenza. Han arruinado un servicio estatal primero semiprivatizandolo y dejando de crear puestos de trabajo de calidad.
yoshimi-san
16/03/2025 21:18
Han desprestigiado una empresa estatal convirtiéndola en una vergüenza
viriato_
16/03/2025 21:24
Es lo que tiene servirse del Estado y no servir al Estado. Haría falta que nos movamos, o nos espera un futuro negro.